Las pequeñas dolencias estacionales de los niños. Tabla de contenido La primera gripe: ¡qué ansiedad! Pero con el consejo del pediatra será fácil curarlo. Aclaremos un punto: la fiebre no es una enfermedad. Y el luz indicadora de la lucha que el cuerpo está luchando contra gérmenes, virus y bacterias dañinos. No la ataque tan pronto como el termómetro marque un par de líneas extra, pero solo si su temperatura corporal excede 37° durante al menos un par de horas. Vigile a su hijo: ¿está menos animado, no tiene hambre, le duelen los músculos, está tosiendo? Estos son los sintomas que suelen acompañar la llegada de la gripe. Pero si te parece que tu bebé está bien, espera para darle medicina, incluso si tiene algunas líneas. Sin termómetro de oído, sin medición rectal, recomiendan los pediatras: son dos sistemas que requieren destreza y competencia. Sí, en cambio, al modelo. digital: lo colocas debajo de tus axilas y en segundos obtienes la temperatura exacta. Otra recomendación para las madres: no prueben la fiebre todos 10 minutos, ¡Deja que la tensión aumente! Más bien, dado que la temperatura corporal es un dato subjetivo, para comprender cuál es la temperatura de su hijo, midala un par de veces cuando está bien: sabrá exactamente cuándo considerarlo "enfermo". Antes de tomar iniciativas y dar medicamentos a los niños, pida la opinión del pediatra. En general, sin embargo, para bajar la fiebre, mantenga el en casa paracetamol (eficaz y prácticamente libre de efectos secundarios) y laibuprofeno (un antiinflamatorio que tiene una acción curativa más específica). Recuerde que es muy importante respetar el dosis y los tiempos entre una administración y otra. A título indicativo, deben pasar al menos 4 horas para el paracetamol, 6-8 horas para el ibuprofeno. Y si el niño está tomando otros medicamentos (por ejemplo contra la tos), consulte con el médico para evitar la superposición de los diferentes principios activos y evitar cualquier efectos secundarios.